¿para qué?
hay días en que uno se sienta a pensar, bajo un árbol, una almohada, bajo el cielo sin o con estrellas…
si lo vivido tuvo un sentido
si publicar poemas tiene un sentido
si sentir tiene un sentido…
después de todo el tiempo dedicado a cambiar el mundo
y a no dormir
y a no saber dónde iba a terminar el día
y a trabar 25 horas diarias
uno se queda mirando el amanecer de colores
el atardecer naranja
y la vida
y uno se pregunta….¿para qué?
la respuesta no es sencilla y no flota en el viento…
hay amaneceres insomnes en que no hay respuesta.
ni arrepentimiento.
ni silencio.
ni nada….
Puedes seguir cualquier respuesta a esta entrada mediante el canal RSS 2.0. Puedes dejar un comentario o enviar un trackback desde tu propio sitio.